Hay un tema que como padres tenemos que tener claro; la selección de juguetes es muy importante para el desarrollo de un niño. Sin embargo, sabemos que hay muchos factores para el desarrollo de un niño y muchas formas en las que puede aprender nuevas habilidades.
Con eso en mente, ¿cómo puedes saber si los juguetes que haz seleccionado brindan una experiencia completa y respaldan todas las diferentes áreas del crecimiento de tu hijo?
Primero, sería importante considerar la edad de tu hijo. Con cada edad llega un nuevo conjunto de hitos sociales, emocionales, físicos, lingüísticos y cognitivos. Deberás asegurarte de que la experiencia de juego de tu hijo sea tal que apoye el conjunto de habilidades apropiado para su grupo de edad.
Los juguetes que son demasiado elementales no impulsarán a tu hijo a desarrollarse más, y los juguetes que son demasiado avanzados no permitirán que tu hijo los aproveche al máximo si todavía no puede participar completamente de la manera correcta.
También querrás considerar las habilidades específicas de tu hijo, así como las áreas en las que necesita más apoyo para su crecimiento y desarrollo de habilidades.
Todos los niños se desarrollan de manera diferente a diferentes edades. Si bien, por supuesto, hay hitos promedio, querrás considerar si tu hijo tiene o no necesidades especiales, retrasos en el desarrollo promedio o incluso algún desarrollo de habilidades avanzadas que requiera una atención diferente.
Una vez que hayas considerado estos factores para tu hijo, puedes pasar a seleccionar los juguetes que sean adecuados para ellos. Para permitir una experiencia de juego «completa», querrás considerar todas las diferentes formas en que los niños se desarrollan y luego asegurarte de proporcionar juguetes que toquen cada una de esas áreas.
Para nuestros propósitos, tomemos como ejemplo a un niño promedio de 3 años:
Desarrollo del lenguaje: Se espera que un niño promedio de 3 años hable en oraciones completas y comience a responder preguntas. La experiencia de juego que alentará a hablar, contar historias y aprender nuevo vocabulario ayudaría a apoyar el desarrollo de esas habilidades.
Desarrollo cognitivo: Cognitivamente, un niño de 3 años ya debe conocer los colores, comenzar a participar en juegos dramáticos e imaginativos y seguir instrucciones de 3 pasos. A esta edad sería apropiado combinar juegos y juguetes que requieran clasificar por forma o color. Los juegos de mesa que requieren que el niño siga una serie de instrucciones también serían una opción de apoyo. Proporcionar juguetes como juegos de disfraces y juegos de roles apoyará el juego de simulación y alentará a los niños a imaginar nuevos escenarios.
Habilidades motoras gruesas: un niño de 3 años mostrará un mejor equilibrio y podrá comenzar a aprender habilidades como lanzar y atrapar una pelota, saltar y brincar. Introduce juguetes que fomenten la práctica y el desarrollo de estas habilidades físicas. Este es un buen momento para comenzar a jugar juegos de pelota, pasar tiempo en diferentes equipos del patio de recreo, participar en divertidas pistas de obstáculos y, en general, fomentar el juego activo.
Habilidades motoras finas: A los 3 años, un niño comenzará a aprender a usar correctamente las tijeras, sujetar crayones con un agarre de trípode y copiar formas simples. Elige juguetes y actividades para fomentar el desarrollo de los músculos de las manos a fin de apoyar estas habilidades. Colorear y recortar el papel juntos, usar juegos con pinzas y probar con juguetes de construcción que requieran girar y girar. Usa Play Doh y otros juguetes para esculpir que requieran tirar, empujar y apretar.
Desarrollo socioemocional: a esta edad, los niños comenzarán a comprender las emociones y podrán esperar mejor su turno durante los juegos. Fomenta actividades que impliquen compartir pensamientos o sentimientos y juegos que impliquen tomar turnos para practicar estas nuevas ideas.
Habilidades visuales: un niño de 3 años está empezando a comprender mejor y darle sentido a lo que ve. Comenzarán a mostrar una mejor percepción, memoria, habilidades motoras visuales y espaciales. Anímalos a lanzar a un objetivo, jugar juegos de memoria, resolver acertijos simples y jugar con una variedad de juguetes de construcción para promover el pensamiento espacial visual.
*Para los niños de cualquier edad, el juego y el ejercicio al aire libre son increíblemente importantes y no deben olvidarse al considerar experiencias de juego valiosas.