Los juguetes son una manera maravillosa de ayudar a tu hijo a crecer, pero puedes notar que a tu hijo le gusta tomar su juguete, salir corriendo y jugar solo durante horas.
Si te preocupan las habilidades sociales de tu hijo o simplemente deseas pasar más tiempo en familia, hay una variedad de juguetes y juegos que trabajan en el desarrollo de las habilidades sociales, ¡para todas las edades!
Si estás concentrado en estas habilidades, querrás pensar en juguetes y juegos desde una perspectiva diferente. Las mejores actividades para el desarrollo de habilidades sociales son aquellas que fomentan el dominio o el sentido de logro.
Esto significa que los juegos deben ser lo suficientemente difíciles como para ofrecerles un desafío a los niños, pero lo suficientemente alcanzables para que ellos obtengan las partes bien y tengan éxito por sí mismos.
Los juegos que encuentran este medio feliz ayudarán a su hijo a desarrollar todo tipo de habilidades y aumentar su autoestima, ¡lo que hace maravillas con las habilidades sociales!
Tabla de Contenidos
El juego de imitar
El juego imaginativo puede ser algo que los niños hacen solos, una vez que alcanzan cierta edad. A menudo se ve a los niños fingiendo que son superhéroes o personajes de su programa de televisión favorito.
Esto es genial porque ayuda a fomentar la creatividad, pero hay muchas otras situaciones que pueden simular que les enseñan algo sobre el mundo real. Y con la incorporación de una sola persona, el juego de simulación puede convertirse en una excelente manera de enseñar habilidades sociales.
Los niños pueden jugar juegos de palabras simples como charadas o mano a mano que fomentan la autoexpresión, la imitación, la comunicación no verbal y más. ¡Esto se puede jugar con algunas personas diferentes para hacerlo más interesante!
Del mismo modo, existen muchas opciones que le permiten a tu hijo asumir un papel diferente, más reflexivo y aprender a lo largo del camino.
Es posible que tu hijo quiera disfrazarse y usar una variedad de herramientas a su alrededor para sumergirse realmente en este nuevo rol.
A los niños les puede gustar jugar a la tienda, el chef, el jardinero, el carpintero y simular la limpieza. Los padres también pueden ayudar a los niños a aprender sobre su salud ayudándolos a jugar al médico o al enfermero. Otra excelente manera de exponer a los niños pequeños a un entorno muy práctico es jugando a la escuela.
Puedes ser el maestro y decirles lo que necesitan hacer en clase cada día (sentarse a la hora del círculo, prestar atención, levantar la mano, usar su voz interior, poner sus oídos para escuchar, etc.). Esto los ayudará a prepararse para seguir instrucciones y jugar bien con otros niños cuando llegue el momento.
Actividades multijugador
Nunca es demasiado pronto para empezar con algunos juegos multijugador. Si bien hay algunos juegos de mesa complicados, también hay algunos simples que pueden ayudar a tu hijo a aprender a tomar turnos, seguir direcciones, juzgar y expresarse.
Los niños pequeños pueden participar en juegos simples, como Jenga y Kerplunk, que solo requieren una regla o movimiento.
A medida que los niños crecen, pueden agregar algo de estrategia a estos juegos para mejorar en ellos, o pueden probar suerte en juegos como Uno o bingo que requieren más atención y un poco de pensamiento crítico.
Los niños también pueden trabajar junto con otros para construir una gran vía de tren, una ciudad hecha de legos o un carro de juguete con muchas partes. Este también es un buen momento para introducir rompecabezas cuando los niños tienen la edad adecuada.
Competencia
Un aspecto inevitable del uso de juguetes y juegos con personas es la competencia. Algunos niños que no tienen experiencia jugando con sus compañeros o incluso con miembros de la familia no lidiarán muy bien con perder.
Puedes fomentar la competencia amistosa haciendo carreras de relevos, búsquedas del tesoro o pruebas cronometradas para actividades que ya conocen y aman. Esta también es una buena introducción a los primeros deportes. Puedes enseñarle a tu hijo sobre baloncesto, fútbol, bolos o golf simplemente jugando con ellos para ver quién hace más tiros o derriba más bolos.
Puede que pienses que esto no tiene mucho valor para los niños pequeños, pero automáticamente significa que recibirán algunas instrucciones tuyas en el camino para ayudarlos a lanzar o rodar la pelota de manera diferente y mejorar su rendimiento.
Por esta razón, los deportes son una excelente manera de mejorar la coordinación, la motricidad gruesa, el juicio, la percepción visual y más de los niños. Esto también los acostumbra a seguir instrucciones, recibir orientación y pedir ayuda cuando la necesitan.
Haciendo cosas para los demás
Las manualidades son una excelente manera de ayudar a los niños a ensuciarse las manos y tener algo hermoso que mostrar al final. Puede ayudar a los niños a hacer prácticamente cualquier cosa con artículos que ya tiene en la casa.
Si bien es posible que desees conservar algunas de sus obras maestras, esta es una buena manera de que aprendan a dar, compartir y recibir.
Es posible que quieran hacer un brazalete de la amistad para la niña de su clase o hacer tarjetas para donar a un hogar de ancianos local.
Esto no solo les enseña a los niños a dar, sino que los hará sentir bien consigo mismos, fomentando aún más el sentido de recompensa que buscamos con el desarrollo de habilidades sociales.